fantom!

Friday, October 01, 2010

fe de erratas

ahora, a 48 horas del suceso que lanzó un balde de agua fría, con hielo y estalactitas sobre mi cara, me doy cuenta que no, no es que yo no haya sido suficiente para tí. no no no.
yo soy una persona LA RAJA, me encanta lo que hago y soy sumamente feliz con mi vida. tengo las mejores amigas del mundo y tengo una capacidad de resiliencia jevi. ni el campeón olímpico de vallas salta los obstáculos mejor que yo. y soy muy humilde, claro.
la verdad es que si fallé en algo lo siento mucho, que pena, pero ya pasó. y debo decir que una mujerona como yo nunca va a ser poco para alguien.
he dicho.

Thursday, September 30, 2010

y ahora?

y ahora que chucha se hace, con todo lo que tenía guardado para entregar? queda en algún lado, o al final termina desapareciendo en el universo paralelo de lo que nunca se dijo?
que hago con todo el cariño (amor, pero nunca te lo dije), con todas las ganas de cocinarte, con todas las ganas de ver tele contigo mientras te toco el pelo. todas esas ganas de cosas que ya no fueron me apretan el pecho ahora y no puedo dormir porque siento que tengo un gigante sentado encima mío.
no sé que hacer con todo esto. la verdad es que no puedo hacer mucho, más que asumir que no soy suficiente para ti, y que al parecer estuve viviendo una realidad que no era, porque yo sentía que eramos la patá juntos.
igual te agradezco hartas cosas, tantas que no puedo enumerar. me cambiaste y me diste mucho. fuiste un gran amigo también, y esas cosas a mí no se me olvidan.
ahora sólo me queda hacer control de daños y esperar que no sean demasiados porque me quedan muchas cosas por hacer todavía.
a seguir caminando entonces. eso es lo que hay que hacer.

Sunday, December 27, 2009

Se acaba el año.
Se acaba mi pega.
Se acaba una ilusión/obsesión que cada vez me hacía peor, pero se acaba igual.

Que año más nada. No rescato ni una hueá. Ándate luego.

Thursday, December 17, 2009

...que te cae en la cara.

Beatriz - trágate tus palabras - Valdés.
Esa soy yo.

Sunday, November 29, 2009

Manifiesto

Nunca he sido la segunda opción de nadie. Y no voy a serlo jamás, menos de un tipo tan fome y egoista como tú. Me diste lata.
Fin de la declaración.

Tuesday, July 21, 2009

i'll be back.

Como no escribo hace centurias en este blog, y cara de nalga lo tengo como mi página web en todas mis "redes sociales", decidí actualizarlo en este momento. ¿Por qué ahora? Porque ya hice todo lo que me había propuesto en la tesis por el día de hoy, y me quité un mini peso de encima. Ahora puedo ociosiar sin cargo de conciencia.
Se me ocurrió algo entretenido para ustedes. Voy a poner mi iTunes en shuffle, y voy a dar una leve explicación sobre las canciones que me salgan en cualquier orden. Es decir, por qué la tengo y qué se me ocurre cuando la escucho. ¿Cuántas canciones? No sé, voy a parar cuando me aburra.

1. Getting away with it- Electronic: Esta banda es un híbrido entre New Order, Pet Shop Boys, The Smiths y un poquito de Kraftwerk, o sea. La tengo porque la bajé hace años, el 2003. En vacaciones de invierno, salió en la radio Tiempo, y como yo tenía el teléfono del Dj, lo llamé para preguntarle como se llamaba la canción para bajarla. Justo en esas vacaciones se enfermó mi amigo Guatón, le dio Gillian-Barré y lo ibamos a ver al hospital día por medio para entretenerlo porque el pobre siempre tenía compañeros de pieza locos. También en esas vacaciones nos fuimos todos los amigos a Maitencillo, y yo llevé mis discos, entre los cuales estaba esta canción. La escuchamos caleta, y todavía la amo.

2. Wave of Mutilation - The Pixies: Esta canción está porque mi hermano es un maniático de Pixies y tiene la discografía completa. A mi no me gustan mucho la verdad. Ahora el tiene su computador propio ahora y con su música ahi. Es un buen momento para borrar Pixies de mi computador. Me ocupa como 3 gigas.

3. Oxford Comma - Vampire Weekend: La Rocío me la pasó de su pendrive una noche en que volvimos de un carrete en octubre del año pasado. Habíamos ido a Constitución con la Ana también. Nos juntamos en mi casa antes y nos tomamos una promo entera entre las tres. Hasta bailamos reggaeton en mi pieza y de ahí nos fuimos a la partusa. A la vuelta, la Rosa pasó a buscar su computador porque lo dejó en mi casa y nos tomamos una piscola más, de la cual todavía me arrepiento. Creo que nunca la había escuchado hasta ahora. No es mala, pero no es mi estilo at all.

4. The Crawl - Placebo: La tengo desde mi época de amor a Placebo, que creo que partió el 2003 o 2002. Los cachaba de antes, pero en esos años tuve una obsesión. Los escuchaba todo el día. La primera vez que vinieron a Chile con la Rocío fuimos al hotel a verlos, y entramos barsamente mientras todos los fans gritaban afuera con pancartas. Cuando bajaron, nos autografiaron el disco, conversamos con ellos y nos sacamos una foto con el bajista. Mientras todos los fans nos puteaban a gritos. Desde afuera. Fail para ellos. En el mismo hotel se estaban quedando los de Mago de Oz, que también tocaron por esas fechas. Y puedo dar fé de que se visten de piratas en su vida cotidiana. Que horror.

5. Pluto - Bjork: Esta canción me recuerda a Paulina Barticevic (a.k.a. Barta), mi compañera de curso y banda y estudios y tesis y todo. Es su canción favorita de Bjork, que es su cantante favorita. O sea, es su canción favorita. O era, no sé. Pero esta canción me recuerda a ella así cuaticamente. Y la tengo porque tengo la discografía completa de Bjork.

6. Fallen Angel - Poison: Ja! La tengo porque, basalmente, me gusta el pop glam ochentero. La bajé el 2002, y está en mi disco "Party Time! Maitencillo 2002". En ese mismo disco está "I want you to want me" de Letters To Cleo, y lo escuchabamos todos los amigos TODAS LAS NOCHES y las bailabamos en el living de la casa de playa de Keko. A ver si se adjunta la fotito...

7. Last Dance - The Cure: Uf! Esta canción también es del año del ñauca, de hecho, veré la fecha en que la bajé... 22 de mayo del 2003. Mala época de mi vida, muchas penas, mucha confusión... esto de la adolescencia... menos mal que ya pasó. La música me acompañaba en el dolorsh. Aunque no se confundan. Sigo escuchando The Cure, y harto. Claro que ahora tiene otra connotación. Ahora escuchar el Disintegration es escuchar una joya músical, que se puede oir inparcialmente. Que bello disco por el amor a Elvis!

8. Rhythm of The Night - Corona: Qué verguenza. Pero lo asumo. Me gustan las canciones eurodance. Esa canción la bajé el 2003 también, una vez que nos fuimos a tocar a Valpo con Carmille, y decidimos volvernos esa misma noche después de tocar. Para que no nos quedaramos dormidas manejando, hice un disco llamado "The Summer is Magic!" donde está incluida esta canción. Lo escuchamos a la vuelta, y claramente, nadie se durmió.

9. Chorus - Erasure: Esta canción es un temón. La bajé el 2001 o 2002. Pero la verdad es que escuchaba esta canción desde que era una infante de 7 años o menos, porque me regalaron el cassette (o se lo regalaron a mi hermano, que era lo mismo) y todavía lo tengo. Junto con el Abba-esque, en que hacen covers de Abba. So gay.

10. Live to tell - Madonna: La verdad es que no me gusta mucho Madonna (sí, crucifíquenme), pero esta canción es mi favorita de ella, y puede que sea una de mis canciones favoritas de la vida. Es que la letra es increible, el ritmo, los instrumentos... todo. La escuché mucho durante un tiempo, después de que un pololo me había pateado y después se puso a pololear con mi mejor amiga. Fue terriblemente penca, y casi que lloraba cantando el coro "a man can tell a thousand lies, I learned my lesson well, hope I live to tell the secret I've learned, till then it will burn inside of me". Córtate una vena pos loco. A pesar de ese amargo capítulo de mi vida, no asocio esta canción a eso, y ahora la escucho y la disfruto por lo buena que es. Y por si les interesaba, ahora con mi ex somos amigos y con la amiga que pololeó con el también. Soy zen.

11. Time of No Reply - Nick Drake: Creo que la tengo desde el 2007, y creo que fue porque el Feña (antes de hacerse famoso por ser Fernando Milagros) me recomendó escucharlo. Me gustó bastante, aunque demasiado folk para mi. Bueno, escuchen F. Milagros y entenderán por qué me lo recomendó. Con esta canción no me acuerdo de nada. Así de simple.

12. Mis-Shapes - Pulp: Oh god, esto fue bajado en mi época brit. Onda Teatro Carrera, Bal Le Duc (o "Valeluca" cuando entrabas por $1000 y más encima te daban cover), Blondie. Mala moda, mal look. Era semi gótica, usaba camisetas de malla (que, ojo, mi mamá me compraba), y creo que una vez salí con guantes de terciopelo que me llegaban al codo. Valor. En general yo escucho toda la música que escuché en mi pasado, pero este tipo de música sí que no lo escuché más. Lo único que rescato es Suede, porque ellos sí que eran buenos. Y Blur. The Universal es un temazo.

13. Broken Promises for Broken Hearts - She Wants Revenge: Esta canción la tengo porque mi hermano ripió el disco en mi compu. Lo trajo a mi casa hace como 3 años, porque una compañera de su pega que estaba enamorada de el lo encargó de USA para regalarselo. Filo. La cosa es que lo escuché y lo encontré idéntico a Interpol. Y cómo me gusta Interpol, me lo dejé. Le regalé a la Montse una copia para su cumpleaños. Un cumpleaños que se celebró en Estudios Capitán, y Pondie puso música. Y le pedí toda la noche que pusiera "Maneater" de Nelly Furtado, hasta que casi se enojó en serio, y me molestó bastante tiempo con eso.

14. Playground Love - Air: Esta canción la tengo porque sí. Yo creo que todo el mundo la tiene. Es como Fade Into You de Mazzy Star. Esas canciones que todos tienen porque hay que tenerlas, porque son lindas y sirven para un momento íntimorsss. La tengo desde febrero del 2003, pero la verdad es que no la he escuchado mucho. La electrónica suave no es mi estilo.


Bueno, me aburrí así que llego hasta aquí nomas. Enjoy!

N. del e: Por si no se entendió, las canciones que reseñé fueron las que salieron a la suerte en shuffle, no las elegí yo. Fue el destino. Saonda!

Monday, June 02, 2008

Odio a los pokemones



Sí, los odio con furia. Demás que me llega algún post de estilo “ke te pazaa no kxai na muereete prra adiozzzzz”, pero no me importa nada. Esos niños no se merecen mi respeto. Los odio.

Mas encima tengo la mala suerte de vivir en el metro salvador. Generalmente vivir aquí ha sido algo bueno, y siempre he agradecido vivir cerca de un metro, cerca del centro, cerca de Provi… pero ahora es horrible. A la entrada de la estación, donde hay un ameno parque, ahora está lleno de pendejos muy feos (porque sí, lo son), vestidos con unas pilchas que no sé de donde sacaron, con todos los colores posibles y todos los accesorios que puede tener una persona puestos al mismo tiempo. Hay unos con el pelo parado, otros con tanto gel que pareciera que no se han lavado el pelo nunca, otros que definitivamente no ven nada con sus chascas arriba de los ojos. Nunca había visto tanto pendejo con el pelo planchado junto. La otra vez vi a una cabra chica con el pelo a lo Cruela de Vil, onda un lado negro y el otro blanco. Un asco.

La razón por la que se juntan a la salida del metro salvador, es porque de esa forma llegan a Luis Matte Urrejola, calle donde está Chilevisión, y por ende El Diario de Eva. Programa patético por excelencia. Por culpa de ese programita ahora los pendejos tienen caca en el cráneo. Llega llorando el niño emo porque no le regalaron la capa de moda. Temas como “amiga, vuelve a ser visual” me dejan con la boca abierta. Hagan una edición especial del diario de Eva, inviten a todos los cabros chicos al programa y cuando estén todos adentro tiren una bomba. Asi el metro salvador volverá a ser lo que era. Un lindo lugar donde reparten el Publimetro y donde una niña vende sánguches a los que no alcanzaron a tomar desayuno. Ahora la niña de los sánguches ya no va, seguramente porque los pokemones la asaltaban.

Yo la verdad no sé que hacen los pokemones con sus vidas. Machetean en las esquinas, van a bailar reggaetón a la disco y se sacan fotos para el fotolog. Porque afortunadamente todavía no invaden Facebook. Alguna cosa que no se hayan tomado. Si yo tuviera un hijo pokemón, juro que lo encerraría y no lo dejaría salir a la calle hasta que se vista como una persona. No sé cómo no cachan que imitar a un mono animado es universalmente ñoño. Y tampoco entiendo cómo piensan que así están buscando su identidad si se visten todos iguales. Una vez vi a una tropa de pendejas con el mismo peinado, pero exactamente igual. Argh, las odio!

Espero que esta moda pase luego, así como pasó también vestirse de colores fluor. Aunque esto es infinitamente peor.

DIE POKEMONES, DIE!!!

Friday, May 09, 2008

El Club Mist

Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que escribí, y quiero pedir perdón a mis pocos fans, que quizás se metieron a la página en este tiempo, y se han ido decepcionados. Lo lamento, y prometo ponerme más al día, porque ahora tengo tanto tiempo libre que misteriosamente, nunca tengo tiempo para postear. Pero me haré el tiempo, lo juro.

Bueno, como casi todos sabrán, ya egresé de la universidad, y después de una entretenida gira de estudios, y de una tediosa práctica profesional (en que hice 12 horas diarias de lunes a viernes para tener un poco de verano), quedé libre como el viento. Eso entre comillas, ya que sigo haciendo un turno voluntario en la clínica los miércoles en la tarde, y tengo un trabajo que me permite pagar mi lujosa vida.

De eso voy a hablar ahora, de mi pega. Todos los jueves y viernes (y algunos sábados) desde marzo he estado trabajando como barwoman en el nunca bien ponderado Club Mist. Esa es la razón por la cual he estado tan desaparecida y con tan poca vida social. Ya había trabajado ahí antes, haciendo unos reemplazos, pero ahora soy del staff fijo, y qué quieren que les diga, me encanta. Es una lata eso sí tener que llegar a las 21:30 a contar copetes e irse a la hora en que se vaya el último pelagato ebrio, pero es divertido trabajar ahí. No gano una millonada, pero me permite ir a comerme un crudo de repente a la fuente suiza, o comprarme algo de ropa en Patronato. Ya no me compro chicles Bigtime, ahora compro chicle Orbit. Ya no compro Belmont Light, ahora fumo Viceroy Light. Esas cositas me hacen muy feliz.

Desde que trabajo en el Mist, ha habido varios cambios. No se si alguno de ustedes había ido antes de marzo de este año, pero ahora es otra cosa mariposa. Hay una infinidad de vasos (para los que nunca han trabajado en un bar, les digo que era imposible atender gente con tan pocos vasos que si llegaban a pedirte algo, tenías que decir “traeme un vaso y te lo hago”), hay una gran variedad de copetes, desde piscola hasta fernet, pasando por Absoluts de miles de colores y sabores, hay un plasma (oh sí, un plasma) donde pasamos dvd’s de Kiss, The Who, Capitán Futuro, y si nos da lata, dejamos puesto el VH1 y sus realities estúpidos , y por último, ahora ponemos maní en la barra. No es del maní entero como el Liguria (que lo encuentro más higienico, pero en fin), pero es saladito, o con merquen, o a la fina hierba. Tostaduría Talca rocks.

Ahora bien, hay fechas y fechas. Como sabrán, Club Mist queda en el Barrio Suecia. La creme de la creme del criminal regetonero. Con estos antecedentes, supondrán que es raro que un grupo de gente vaya pasando por fuera y diga “oh, toca un grupo interesante, entremos”, porque la mayoría de los que pasan por fuera están buscando un local con música muy fuerte, bailable, y ojalá con una banda que toque covers de Maná para engrupirse a una minoca, susurrándole al oído “Sigue lloviendo al corazón…”. Por todo esto, todavía depende exclusivamente de quién toca la concurrencia. La mayoría de las veces van unas 50 o 60 personas, quizás más. Ha habido tocatas brígidas, como la de Yajaira el año pasado. Por la plata que entró en la puerta, se supone que entraron como 250 personas, pero nadie se explica como entró toda esa gente, si el lugar es chiquitito. En las tocatas de The Ganjas o de Guiso generalmente queda la escoba. Se llena, no se puede respirar adentro y necesitamos como a 5 personas en la barra para cubrir la demanda de alcohol. En esas fechas uno no se da cuenta y ya se pasó la noche, claro que no puedes ni ir al baño. Hay otras fechas que son un bodrio, afortunadamente ha habido sólo 2 desde que empecé en marzo, y considerando que se abre 4 dias a la semana, ha sido muy poco. Esas veces son lo peor, la noche se hace eterna, completo hojas enteras de sudokus de La Segunda, y además suele pasar que la banda es pésima (y por eso no va nadie).

Han tocado grupos famosos y otros ni tanto. Me ha tocado gente cagada para comprar y otros que se gastan todo el sueldo. Javiera Parra se quejó por lo caro del vaso de bebida (y cuesta luca, lo que no es caro si estás en un bar), y otra gente se toma treinta lucas en Absolut Pears. Algunos de puro monos, piden fernet y no saben ni de qué es. Después llegan curados quejándose de que se los hice muy fuerte, cuando no tienen idea de que esa cosa tiene 45 grados. Y más encima es más malo que el hambre.

En los primeros días de trabajo me amargaba pensando en que mis amigos estaban carreteando y yo trabajando, pero ahora me lo tomo con humor. Si en verdad trabajar ahí es como un carrete. Todos son amigos, mi pololo trabaja ahí también ( claro que de sonidista), casi siempre va la misma gente, y tengo la barra a mi disposición, claro que casi nunca tomo más de un copete durante la noche, excepto que esté demasiado fome. He probado todas las Kunstmann que existen y otras cervezas raras, aunque Stella Artois siempre será mi favorita. Descubrí que el Absolut Raspberry es más olor que sabor y que el de vainilla es como tomar colonia Victoria’s Secret. He aprendido muchas cosas, lo único que me falta es aprender a hacer coctails con coctelera, y ahí tendrían que darme el diploma de barwoman por mérito.

Ya saben, vayan a verme algún día, y feliz los atenderé con mi mejor sonrisa.

Thursday, September 13, 2007

Actualizeichon

SI! este blog ha vuelto a la vida. Lo más probable es que sea absolutamente transitorio y después de esta entrada no haya más por meses. Pero la intención es la que vale. Desde hace 5 meses que no escribía y me dieron ganas de relatar un poco lo que ha sido de mi vida en este tiempo.

Partiendo por la compra de un computador nuevecito de paquete, que no se queda pegado ni se le desconecta el mouse, ha habido bastantes cambios. Estoy en último semestre de la carrera, y veo como se me acerca el futuro vertiginosamente. En todos los ramos mencionan por lo menos una vez el hecho de que vamos a egresar luego, y que tenemos que estar preparados para la vida allá afuera. Nos enseñan de IPC y de impuestos, y de tipos de ahorro e intereses. Falta que los profesores nos ofrezcan cuentas corrientes.

Hasta ahora me ha ido bastante bien, menos por la “echación” de un ramo, Sistemas de Aseguramiento de Calidad”. Un ramo de mierda, que no sirve nada más que para coladero y para aprender a hacer planes HACCP. Y ganar caleta de plata con ello. Pero un ramo interesante ha sido el internado.

Este ramo consiste en rotaciones por diferentes clínicas y clases teóricas, donde además se incluyen salidas a terreno como policlínicos, donde vamos a vacunar y atender gratis a perritos y gatitos de Huechuraba. Hasta ahora he tenido rotación por 4 clínicas distintas, una prueba teórica y 2 policlínicos, y debo decir que ha sido entretenido. Cansador, pero entretenido. Casi no tengo días en que no haya que hacer nada, todos los profesores piden casos clínicos, y más encima mi grupo tiene la “suerte” de que adonde estemos, llegan casos raros que no llegan jamás, y los profesores dicen “uy pero que suerte tuvieron de ver esto! Para mañana traigan toda la información que existe”. Hemos visto muchas cirugías, las cuales me cargan y por eso oficio de anestesista, hemos sido verdaderos doctores en los policlínicos, adonde recibimos y recetamos a nuestros pacientes, y hemos visto cosas verdaderamente raras, como perros con escaras tan grandes que se les asoman los huesos y no tienen ningún signo de infección. Hasta ahora he sacado dientes, he llamado por teléfono a dueños de perros para avisarles que su mascota amada tiene cáncer y que se pueden morir, he visto una cirugía de cráneo en un perro de dos kilos y he sostenido en mi mano a un feto muerto de Yorkshire, y ya nada me sorprende. Excepto un tumor mamario que le sacamos a una perra que tenía hueso adentro y era tan asqueroso que en verdad me dieron ganas de vomitar. Pero además de eso, he soportado bastante bien. Es que si te da asco la sangre no puedes hacer nada como veterinario. A lo más trabajar en fauna silvestre, y lo encuentro más fome que chupar un lápiz.

El resto de mi vida ha sido bastante parejo, ha sido más estudio que nada, pero por lo menos ya le veo un final a esta carrera de mierda. Lo único que quiero es egresar para no tener que ir más a la universidad.

Y ahora, basta de hablar de carreras estúpidas, voy a hablar de mi computadorcito lindo. Es un bello notebook, negro y pequeñito, ¡y tiene Windows Vista! Ya se que para la mayoría de ustedes eso no significa nada, pero para mí, que funcioné con Windows 98 hasta hace dos meses es un gran paso. No podía enchufar un pendrive, no podía instalarle impresora, no podía meterme a youtube… fue horrible. Igual yo no soy para nada computina, pero eso era excesivo. Los primeros días que lo tuve le instalé todas las huevadas que existen. Le instalé el Sims 2, el Photoshop CS2, el Office 2007 (que es hermoso) y millones de juegos que antes me decían “no puede instalarlo debido a la falta de recursos”. Igual fue bastante trágica la forma en que murió el otro.

Estaba posteando en el fotolog de la Rocío cuando se apagó su pantalla, y luego se apagó el CPU. Extrañada, traté de enchufar el cable de poder al CPU, pensando que se había desenchufado, y cuando lo toqué sonó un ruido de petardo y salió humo negro. Ahí casi muero. Nunca había resguardado nada desde que el computador existía, y eso fue el año 2001. Todos mis documentos, mis canciones, mis fotos se habían perdido. O por lo menos eso pensé yo, hasta que llamé a Don Toshiro y el me dijo que le sacara el disco duro y se lo llevara, a ver si se podía rescatar algo. Eso hice, y afortunadamente el disco duro estaba intacto y lo único fallecido fue la fuente de poder. Ya sé que esas cosas cuestan muy baratas, pero seguir invirtiendo en ese computador fósil no tenía mucho sentido, así que era hora de comprar otro. Cuando Toshiro vino a dejarme el contenido del disco duro, fue muy penoso. Todo lo que había cabía en 3 DVDs. Si tenía 18 gigas, y como 8 ocupados sólo en sistema operativo. So sad.

Ahora mi vida cambió, y me di cuenta que no cachaba nada de computadores. En las carpetas con fotos salen las fotos en chiquitito, y me impacté por la modernidad la primera vez que lo vi. Ahora puedo hacer que las canciones que escucho se vean en MSN, y no se demora casi nada en cargar juegos. El otro computador era como un Atari, tenía que prenderlo y después de una hora volver para poder jugar.

Pero dentro de todo, igual siento nostalgia. Los que conocieron “la pieza de arriba” lo entenderán. Era la pieza donde vivía el otro computador, un reducto de madera pasado a pucho, aislado de la casa. Estaba en la terraza, en el quinto piso del edificio, casi que al aire libre. La primera vez que tuvimos computador, se decidió ponerlo ahí para que no estuviera adentro de la casa (y en verdad adentro no había espacio, apenas hay espacio para nosotros los humanos), y para que la gente que se quedaba trabajando no molestara al resto. Al final esa pieza se convirtió en un clásico de conversaciones, y no sé que efecto tenía pero uno se podía fumar fácilmente una cajetilla en ese lugar. Era el lugar ideal para fumar pitos y para conversar de temas “privados”. Ahora la pieza está vacía y solamente quedan cajas, porque ahora hay wi-fi, y no se necesita subir. Por un lado eso es bueno, porque odiaba tener el computador arriba los días que tenía que hacer trabajos y habían diez grados bajo cero. Ahora puedo trabajar metida dentro de mi mullida cama, con Scaldasono y todo. Pero también era como mi lugar personal (porque nadie más que yo usaba el computador, mi mamá no sabe ni como prenderlo), donde podía cantar fuerte y fumar caleta sin que mi mamá pasara botando el cenicero y diciendo que me voy a morir. En fin, cada situación tiene sus pros y sus contras, y definitivamente es bueno estar chateando sin que la mano del mouse se ponga azul. Y también es bueno escuchar una canción en la radio y poder bajarla altiro. Antes, entre tener que subir y prender el computador ya se me olvidaba qué canción quería bajar.

En fin, mi vida ha estado bastante regular como podrán ver, y me alegra tener un ratito para poder escribir y ponerme al día. Igual esto no lo lee nadie, pero cuando sea vieja yo lo voy a leer y me voy a reír un buen rato.

Chaito!

Friday, April 06, 2007

Viernes Santurrón


Hace mucho tiempo que no escribía aquí. La verdad es que tuve harto tiempo, pero no las ganas. Prefería leer blogs de otras personas que escriben siempre, además que no tengo nada muy entretenido que contar. Ahora tampoco tengo nada divertido que decir, pero tengo el tiempo y las ganitas. Además que los viernes santos me traen muchos recuerdos. Misteriosamente, recuerdo lo que ha pasado en un día como hoy desde hace varios años atrás, se podría decir que desde 1997. Varios días como hoy fui a comer Fanesca a la casa de la Camila o a la casa de algún ecuatoriano que estuviera en Chile, y fuera amigo de la mamá de la Camila, claro. Toda la comunidad del Ecuador se juntaba en la casa de alguno de los miembros, y desde el alba empezaban a cocinar este suculento plato, ya que requiere mucha dedicación. Eso si, ahora ya no es tanto, ya que se puede encontrar todo en el supermercado, y antes las pobres indiecitas tenían que ir a cosechar los granos y ir a buscar agua al río.
Ese platillo consistía en 12 granos, representando a los doce apóstoles. Dentro del menjunje habían porotos, garbanzos, lentejas, habas, arvejas, maní, almendras, achiote, entre otros (En realidad nunca supe como la casa no se elevaba a la hora de la siesta) También le traía unas masas fritas, puré de papas, y coronando la sopa, un gran trozo de bacalao. Demás está decir que la preparación no se veía muy deliciosa, por lo que la gente mañosa sufría. Yo era muy feliz, porque me encantaba la fanesca y podía comerme todos los platos de los otros que no la querían. Una vez me comí cuatro platos, y como iba pasando los platos vacíos a los demás, yo era la única que tenía el plato siempre lleno, y me retaron por mañosa. Bah!
Esa tradición se acabó hace como 4 años, porque la tía de la Camila se murió y nadie estaba con ánimos de cocinar, y menos la comida que todos hacían juntos. Ahora la tía Renata está de nuevo en Ecuador, y ya nadie oficia la ceremonia. Extraño la fanesca. Más que nada, extraño lo lindo de juntarse a comer todos. Me sentía como en familia, yo creo que más que en la mía propia.

Otro viernes santo que recuerdo fue el 2004, una vez que mi gato se enfermó y hacía pipí con sangre. Tuvimos que partir corriendo a alguna veterinaria, pero todas estaban cerradas. Cuando encontramos una abierta, lo tuvimos que dejar hospitalizado por la noche, y el pobre estaba tan asustado... si hubiera sido por mí, me hubiera quedado con el, pero no se podía. Llamé cada una hora, para preguntar como estaba, si se sentía bien, si había pasado algo malo. Al otro día lo fuimos a buscar. Ya estaba sanito, y cuando le abrieron la jaula, se tiró a los brazos de mi mamá. Claro que cuando llegamos a la casa nos ignoró como por una semana. Yo creo que estaba enojado por que lo dejamos ahí solo, y más encima su jaula quedó justo arriba de otra que tenía una camada de gatitos recién nacidos que chillaban todo el rato. El es muy rencoroso. Si llego con olor a otros gatos, me hace desprecios. Mamón nomás.


En el 99, fue mi época de creyente. Ese año fui a un retiro en La Ermita, con el grupo de CPJ. La verdad fui porque iban a ir mis amigas, habían hombres y era barato. Pero resultó que salí bastante espirituada. Ellos saben como hacerte sentir culpable por no creer en Dios. Recuerdo un bosque, adonde nos llevaban a cantar canciones de iglesia, esas canciones con tanto acorde menor que aunque hablen de fiestas y alegría igual te da pena. Y en verdad, si uno piensa en una pobre persona a la que clavaron viva y dejaron que se muriera desangrado, me conmuevo. No porque haya sido "el hijo de Dios" o Dios mismo si eso de la Santísima Trinidad fuera cierto. Si no porque era persona. Si empezamos a hablar de torturas, creo que me da más pena pensar en las minas a las que les metían ratones por la vagina el 73. Pero no hay un viernes feriado para conmemorar eso. La cosa es que la espiritualidad me duró todo ese año, pero luego se desintegró lentamente. Ese año fue el último en que fui a una misa voluntariamente, porque no creo que los matrimonios y los funerales valgan.

De todas maneras, me gusta este día. Escucho radio todo el día por que ponen canciones lindas y relajadas que no ponen en todo el resto del año, como "Tu eres mi rey, el número uno, siempre lo fuiste y lo serás" de Lucerito, y "Ghost Town" de Cheap Trick, además de las baladas de George Michael, mi ídolo. Y todo esto en la radio Concierto. Raro. Además que un viernes feriado no le hace mal a nadie. Y menos a mí que soy muy estresada. Hoy siempre es el día de levantarse temprano, ordenar el closet y simplemente disfrutar de la tranquilidad de Santiago. Mañana quiero ir al centro a ver las iglesias grandes con los cristos tapados. Aunque uno no crea en eso, siempre es relajante. Y un poquito tétrico. Muajaja!

Monday, January 15, 2007

Blanca y radiante


Hola hola, hace menos de 24 horas que volví de un viaje flash. Tomé un bus a Concepción el viernes a las 12 de la noche, y llegué a la capital ayer domingo a las 5 de la tarde. Todo por asistir al ansiado matrimonio de mi primo Coti, con su polola que sólo había visto una vez en mi vida. Qué más da, si a ningún matrimonio que he ido he conocido bien a los dos miembros de la parejita. Y tampoco he ido a tantos matrimonios en mi vida. Me gustan los matrimonios. Principalmente porque puedo comer mucho y nadie mira feo porque todos están comiendo de la misma forma, y además porque una se emperifolla y queda bonita. El único sufrimiento constante son los tacos altos en los que hay que estar parada mil horas.
El matrimonio fue todo un éxito. Mi primo se veía tan lindo que casi lloré, ví tíos que no veía desde hace mil años, comí muchas delicias, bailé con mi otro primo que es un as de la pista de baile, estuve con mi prima (hermana del novio) que estaba embarazada y iba a tener la guagua al otro día y tenía la guata más grande que he visto en mi vida, y pude pelar con mi hermano a unos cuantos peinados horripilantes que habían entre los presentes.
El resto del tiempo en Concepción fue... raro. O sea, el resto del tiempo fue el sábado en la mañana, pero fue lo suficiente para decir de que Concepción sigue igual que hace 20 años. Había oido a algunas personas decir de que estaba cambiado, que ahora era casi como Santiago, que estaba muy moderno, que habían tiendas grandes... Bueno, todo eso yo no lo ví. Con Sebastián partimos al centro antes de almuerzo, para ver como estaba todo y para airearnos un poquito. El camino era el mismo de siempre, nos fuimos por O'Higgins, y estaban los mismos kioskos donde mi abuela me compraba la revista Barbie, los mismos centros médicos, los mismos semáforos... Llegamos a la plaza de armas y era la misma de siempre. La tienda de ajíes Matthey en una esquina, la galería donde estaban los Gioco todavía existía, con Gioco incluído. Ese era el lugar adonde nos llevaba mi abuelo a jugar a los videos, y podíamos pasar horas ahí. Con Sebastián entramos y fue como un deja vú. Estaban los mismos juegos, con las mismas fichas, claro que ahora también había un dance-dance-revolution donde bailaba una jovencita, y al lado estaba su entrenador diciendole que hacer. Pero esa era la única novedad. Todavía estaba el juego del autito que tira humo, el Tumbleball, Street Fighter, Mortal Kombat, el del convertible rojo con la mina rubia al lado, y los flippers de Los Locos Addams y de Lethal Weapon III. Nos gastamos como $3000 en fichas y las jugamos todas. Sebastián se dio vuelta el juego del convertible, y tenía niños a su alrededor alentándolo. Yo llegué a la misma parte adonde llegaba cuando tenía 10 años. Ni siquiera en el Arkanoid llegué a la tercera etapa. Definitivamente no soy buena para los videos.
El resto del viaje fue ponerse al día con las tías abuelas viejas, arreglarse la cabellera y viajar desde la iglesia en la punta de un cerro hasta La Posada. Todo esto acompañado de una nube de humo que venía desde los bosques porque todos los alrededores de Concepción se estaban quemando. El domingo sencillamente me levanté, fui a leer el diario "El Sur" con mi abuela, que es como la versión sureña de El Mercurio, hice los juegos de "La Ronda de los Sapos" y volvimos
a Santiago en un bus fancy con asientos de cuero, que no sé como lo hizo, pero se demoró 5 horas y media en llegar a su destino.
Cuando era chica me encantaba Concepción.
Siempre luchaba por irme para allá en las vacaciones de invierno, y volvía más gordita y saludable. Ahora ya no me gusta tanto.
Me encanta Santiago con su smog y sus tacos, y con todas las cosas que la gente odia de Santiago. Definitivamente, no podría vivir en un lugar mejor.

Tuesday, November 28, 2006

Vaca... ¿ciones?

Hola hola he vuelto. Estos días han sido un agrado. Reponerme al fin de año necesitó horas de sueño extra y carretes. Esos carretes en que uno no se estresa por que tiene que despertarse temprano al otro día, o tomar poco para no tener caña y poder estudiar con el cerebro lúcido. La verdad es que mi año académico todavía no se acaba. Me quedan 4 horribles exámenes que dar. Cirugía, producción, medicina interna especies mayores y nosología. Pero todavía me queda como una semana para poder vagar.
He hecho hartas cositas en este tiempo de descanso. He ganado plata siendo Dj. También barwoman por una noche, lo que fue perfecto porque no hice nada y me pagaron igual. Más encima me reí caleta sirviendo tragos porque el show era de un tipo de la SCA y los hermanitos Copano, más otra gente que son nuevos, pero creo que serán muy famosos. Con esa plata me compré un reproductor de mp3 con radio y grabadora, que servirá para grabar los ensayos y no nos pase lo que nos pasa siempre, hacemos una canción hit y después se nos olvida para el próximo ensayo. Eso no volverá a ocurrir. Otra cosa que he hecho fue cortarme la chasquilla. Fue muy osado. Me bajaron los monos con mi pelo y me la corté. Así nada más. Ahora voy a tener que ingeniarmelas para que no se me encrespe con cada calor que haya este verano.
Ahora con el grupo nuevo estoy tocando guitarra también. Es todo un desafío por que nunca había tocado y cantado a la vez, y más encima con la guitarra colgando. Hasta ahora va todo bien, ensayando con guitarra, cable, amplificador y correa prestada. El problema es que soy tan petaca que la guitarra se me ve gigante. Si quisiera tocar bajo yo cacho que no podría por estética, y demás que con el peso me iría para adelante. Pero lo bueno es que tengo todo el tiempo del mundo para ensayar con la guitarra colgando y así no hacer el ridículo delante de la gente en nuestro debut. Que susto tocar delante de la gente. Me encanta tener grupo, pero sufro tocando en vivo. O sea sufro antes. Mientras estoy cantando no, y después me siento muy feliz, pero antes es una tortura. Me pongo más nerviosa que perro chiguagua. Pésimo. Pero son los costos que hay que pagar para hacer lo que a uno le gusta. No sé porque no elegí como hobby armar aviones a escala. Si te equivocas nadie lo verá nunca. Además en mi familia no hay ningún "artista". De hecho, en mi casa todos cantan pésimo. Mi mamá es parvularia, y una vez me contó que estaba cantándole a una guagua como de un año, y la guagua le dijo "tía, no cante". Me reí mucho con esa historia, pero mi mamá se sintió muy mal. Igual yo nunca he pensado que cante maravilloso, pero por lo menos le pongo el sentimiento. Estudiando una vez, me fui a hacer un te a la cocina de Barta, mi compañerita de estudios, y empecé a cantar una de las típicas baladas ochenteras que siempre canto, algo así como "I wanna know what love is", y la Wale, otra compañera que estaba ahí, me dijo "Hueona, se me pararon los pelos con tu voz". Su emoción. Igual me desafino a veces, pero si la gente se emociona con mi cantar, entonces la mitad de la misión está lograda. Según mi madre, tengo la voz parecida la Pollo Fuentes (plop.) Claro que como mujer. Igual el Pollo Fuentes es famoso y lo conoce todo Chile. Hasta fanclub tiene, las famosas Pollitas del Pollo. Todavía se juntan y hacen oncecitas en torno a su ídolo, y eso que el Pollo ya está mas desaparecido Matute Jones. Bueno, igual a ese lo encontraron. Los puros huesos, pero lo encontraron. Aunque con el escándalo del servicio médico legal al confundir los cuerpos de unos detenidos desaparecidos parece que lo exhumaron para analizar los huesos de nuevo. Pobre Matute, ni muerto lo dejan tranquilo. A lo más nunca fueron los huesos de el, y hay un perro que se está comiendo el verdadero esqueleto. Siempre son los perros los que encuentran los huesos. Hay miles de policías buscando huesos, detectives y forenses, pero el trabajo lo hace mejor un perro. Como con Hans Pozo. Nunca hubieran sabido que estaba muerto si no fuera porque un perro llegó a la pobla con un brazo humano en el hocico.
Que mala narradora soy. No sé porque terminé hablando de Hans Pozo (o Hans Trozo, como dicen algunos crueles por ahí) Me voy a ir a almorzar mejor.

Tuesday, November 07, 2006

M.U.S.I.C.

Si usted me conoce, ya sabrá entonces lo que el tema "música" significa para mí. Me encanta, me alegra el día, si no escucho música en el metro llego a la universidad con cara de pico. Pero también por otro lado, encuentro tan latero al mundo musical... Es una encrucijada terrible igual, porque vivo rodeada de músicos, unos más mulas que otros, pero músicos al fin y al cabo. Yo ya tuve una banda, y ahora estoy en proceso de formación de otra. A la primera llegué de yapa. Me gustaba cantar, me llamaron para la audición y quedé. Lo demás se fue dando solo. No me di cuenta en qué momento empezamos a tocar en vivo, ni tampoco cuando los locales se iban llenando sólo para vernos tocar. Una vez nos reconocieron en la calle y fue como "chá!". Pero ahí quedó todo. El grupo se acabó, nunca grabamos nada (nada oficial por lo menos) y todos nos olvidaron.
La nueva banda es otra cosa. Somos amigas más que compañeras de banda, menos con Clara, la baterista, que es la única nueva. Muy simpática por cierto :)
Nos juntamos a hacer música por que nos entretiene y por que nuestros grupos anteriores se desintegraron. Nos divertimos, y hacemos la música que nos gusta hacer. Y si esta banda prospera, no quiero ser como el resto.
¿Pero a qué me refiero con "el resto"? Y aquí se me pueden tirar muchos encima. El resto son todas esas bandas chilenas cool que pululan por el underground santiaguino. Todos esos grupos insoportables que se producen como taquilleros antes de salir a tocar, a esos músicos que se ponen chalecos de rombos para verse "alternativo-nerd" pero que no saben tocar ni una weá. Si el rock no es una cosa de actitud nomás. Si es por eso, cualquier pelagato se puede poner una polera noventera de colores fosforescentes y un pantaloncito entubado, y salir a gritar chillidos espantosos. La cosa de ahora es drogarse, curarse, romper una botella de pisco en la cabeza de otro loco. Ya, está bien, yo también me drogo y me curo, y con gusto le rompería una botella en la cabeza a alguien, pero no por eso soy bacán.

Yo creo que me he puesto intolerante con el tiempo. Antes yo decía que todos hicieran lo que quisieran mientras no me molestaran a mí, pero ahora su sola presencia me molesta, aunque no se metan conmigo. Por ene tiempo mis carretes se centraron en ese tipo de gente. Gente así como ambigua bisexual que se viste raro. La weá tonta. Si yo también pasé por mi época dark en que no me ponía ropa que no fuera negra. Pero lo superé. Y ahora veo hacia atrás y me doy cuenta de lo tonta que fuí.
Me da pena todo ese mundillo, porque se ríen del que baila reggaeton, pero igual se les mueve la patita con Daddy Yankee. Y porque no se dan cuenta que son lo mismo que los fans de Mekano, pero en el otro extremo. Yo creo que hay más gente "alternativa" que reggaetonera, así que no sé que tanto se pueden hacer llamar alternativos.
Ahora bien, si eres ambiguo bisexual, y te vistes raro, sólo te falta tener una banda de rock o de electroclash. Siempre serás más respetado como rockero, claro. Porque hasta los electroclashers saben que su música es una mierda. Por último los rockeros tocan alguna cosa, y se dan la paja de cantar, en vez de hablar como robot.
Puedes haber sido en ñoño de tu colegio, el desadaptado de tu universidad, o el niño al que le ponían pañales y lo encerraban en el casillero. Si tienes un grupo de música, puedes olvidar todo eso, y empezar de nuevo. No lo entiendes, pero ahora tus anteojos poto de botella son bacanes. Y los suspensores que te ponía tu mamá ahora son la última moda. Hasta tus frenillos son objeto de deseo, y los otros jóvenes te preguntan donde te los pusiste para copiarte. Algo así como la venganza de los nerds. Y cuando estás arriba del escenario, todos esos años de sufrimiento salen a flote como una oleada de furia perna y empiezas a romper micrófonos y amplificadores. Te drogas y compras whisky, y te lo tomas al seco. Tratas a los ñoños como escoria, por que fue lo mismo que te hicieron a tí. Reniegas de tu pasado, en el que hacías coreografías de canciones de Enya, pero sí le cuentas a todo el mundo que tenías un poster de los New Kids on The Block. Les das besos a tus amigos porque es "rico", mientras los demás te sacan una foto y la suben a fotolog. O Flirck, si saben usar Photoshop.

Afortunadamente, yo nunca seré así. Porque no me gusta el whisky, porque no uso anteojos poto de botella y porque nunca fui nerd. Tampoco voy a romper micrófonos, porque me costó mucho comprarme el mío.
Si algún día rompo micrófonos con mi banda nueva, por favor mátenme.

Tuesday, October 10, 2006

Tanto odio digo yo

Releyendo esta cosa, me di cuenta de que hablo caleta de las cosas que me molestan en este blog. Gotas de lluvia que se meten en los ojos, a los que no comen, a los que hablan tonteras. También he hablando de cosas buenas, es cierto, pero muy poco en comparación con lo malo y feo que reina en el mundo, o mi mundo, mejor dicho. No sé si me estoy convirtiendo en adulta amargada a mis tiernos 23 años y sólo veo lo malo que me rodea. Me carga verme enojada y gritoneando. Algunos compañeros me temen, porque conocen al mounstro que sale de mí cuando me enojo. Cuando eso pasa, sería bueno que me sacaran una foto. Así, al ver mi pelo parado y mis ojos desorbitados, creo que me enojaría menos.

En fin, basta de actitudes negativas. Hoy es un bello día, y voy a escribir sobre cosas lindas. Hay tantas cosas por las cuales uno puede sentirse feliz. Pero cuando uno se va haciendo grande, todos esos detallitos se olvidan, y empiezas a arrugarte y ponerte odioso. Acá va un listado de cosas estúpidas que me hacen inmensamente feliz:

- Un maullido de mi gato cuando me mira a los ojos. Mucha gente cree que estoy loca, pero cada día encuentro más expresión humana en mi gato. Lo amo. Cuando lo veo durmiendo... podría mirarlo por horas. Llena de pelo mi ropa, tiene los sillones convertidos en huiras y cambiarle la arena a su caja es asqueroso, pero lo amo. Y sus maullidos son lo mejor. Tienen distintos tonos, y cuando le preguntas algo, te responde. Existen los maullidos interrogativos, los de emoción, los de miedo, los de hambre, los de "quiero ir al baño". Ya sé interpretarlos todos. Me siento como una verdadera madre.

- El momento después de entregar una prueba. Quizás me fue mal, quizás bien, pero por lo menos se acabó. Se sufre antes y durante, pero después... yeah! Una prueba menos que dar en la vida.

- Ir en el metro escuchando una canción que alegre el espíritu. Me pasa mucho con Smashing Pumpkins. Todos van mirando el suelo, o mirándose en los vidrios, o leyendo el Publimetro, y una ahí está con la sonrisa de oreja a oreja.

- Salir a caminar por calles lindas. Desde que era chica que tengo una fijación con eso. Pero no me gusta solamente ver las casas, lo mejor es ver lo que hace la gente que vive ahí. Eso si, tiene que ser un domingo en la tarde, como a las 5. Hace años que no lo hago, pero antes siempre iba los domingos a la calle Keller, donde hay casas muy raras, con gárgolas y duendes tallados en las paredes. Se respira un aire distinto en esos paseos. Ves a los niños jugando pichangas en la calle, se escuchan las risas de la gente que está disfrutando del asado familiar en el patio, viejas paseando perros y regando el pasto. Me da una sensación de nostalgia feliz que nunca he sabido explicar.

- Jugar bachillerato con categorías extrañas, como "marcas de cigarros", "nombres de bares" o "bandas chilenas".

- Volver de un carrete cuando ya amaneció, y ver la ciudad vacía con la luz de la mañana.

- Acostarse al lado del hombre amado, abrazarlo y olerle el cuello antes de dormir.

- Fabricarle un regalo a alguien que uno quiere mucho, y después ver la cara de alegría del que lo recibe.

- Mirar la lluvia desde la ventana con una taza de té humeante en la mano. Y si la lluvia es con rayos y centellas, no es necesario el té. Sólo sentarse en la ventana a mirar ya es suficientemente hermoso.

- Comerse un plato gigante de bistec a lo pobre cuando una está cagada de hambre, preparado con todo el amor del mundo por mi mamá.



Uf! Esas, y miles de cosas más, hacen que el mundo sea un lugar lindo para vivir. Es cosa de sacarse la venda de adulto de los ojitos y empezar a mirar las pequeñeces, miren que una vez que se entró en el sistema, es difícil salirse. No quiero ser de esas viejas chuñuscas que se lamentan de que toda su vida se convirtió en pagar cuentas. Quiero ser como mi abuela, que se juntaba una vez a la semana con sus amigas viejas, y chupaban y jugaban bridge hasta que amanecía. Tuvo una vida re complicada, poca plata, y nunca dejó de juntarse una vez a la semana con sus amigas a jugar a las cartas y a chupar, feliz de la vida. Cuando alguno de sus amigos se moría, cosa que no era rara, andaba triste, pero decía "por lo menos no soy yo la muerta". Era bacan mi abuela. Espero ser así cuando vieja, pero no sé jugar bridge. Filo, jugaré bachillerato.

Tuesday, September 26, 2006

Mañas

Ya, sé que no escribo nunca aquí, en parte por que no tengo tanto tiempo, y también porque me gusta escribir cosas entretenidas aunque nadie las lea, y nadie me postee. Pero entre ayer y hoy, tengo un tema metido entre ceja y ceja, y no me voy a quedar tranquila hasta que me desahogue.
Odio a dos tipos de personas. En verdad son más, pero me voy a centrar sólo en dos por hoy. Primero, a los que comen poco. Y segundo, a los que no ven televisión. Claramente, yo estoy en esos dos grupos, por lo que puede sonar a comentario medio autorreferente y sesgado, pero este es mi espacio y puedo decir lo que yo quiera.
Los que comen poco me desesperan. Esa gente me enerva. Esos que picotean unos palitos de zanahoria entre comidas, los que almuerzan un yogurt light, los que comen ensaladas en la noche porque sinó "les cae pesado". Me pregunto cuales serán sus motivos, si será para no sentirse tóxicos, para adelgazar, porque son veganos, qué sé yo. Igual de repente yo como ensaladas, pero porque son ricas. Me gusta la gente que come harto, así todo bien grasoso, hamburguesas tan llenas de cosas que se desarman cuando las masticas, burritos con salsas y quesos y carne molida con harto aliño, o un pollo asado con papas fritas que cuando te lo comes te duele el hígado.
Sin querer, me formo opiniones de las personas por lo que comen. Sé que es raro, pero yo no lo busqué. Y creo que tengo razones para hacerlo. Los que comen harto son personas que saben disfrutar. Los que se reunen en torno al asado para celebrar cosas, con choripanes y costillar, chupando los huesitos después. Un asado de pollo deshuesado, o con un salmón a la parrilla es más desabrido que chupar un lápiz. Y la gente que se lo come, igual de desabrida. Y según mi cuadrada mente, fomes como bailar con el hermano. Hay estudios "fidedignos" (Revista Cosmopolitan, mi biblia) que dice que los hombres que comen cosas picantes y bien aliñadas son mas divertidos y candentes. Y yo le encuentro toda la razón. Definitivamente, no me calza un hombre cool, que coma ensalada. Para conquistarme, tienen que llevarme a comer una chorrillana.

Y ahora el otro punto: La TV. ¡Que maravilloso aparato! Es una cajita llena de sorpresas y cultura. La prendes, y te teletransportas a cualquier parte del mundo en un abrir y cerrar de ojos. Te informa y te entretiene. Gilmore Girls, ER, SQP, Los cazadores de mitos, entre tantos más. El TV cable es lo mejor que me ha pasado, y agradezco por él cada día de mi vida.
Sin embargo, hay personas que no entienden. Que no saben apreciarla. Los comentarios tales como "no, yo no veo tele. me aburre" me dejan pasmada. Quizás muchos lo dicen para hacerse los interesantes, así como "prefiero leer un buen libro". Pamplinas! He leido muchos buenos libros en mi vida, y eso no quita que me guste ver televisión! Hay algo en esas personas que me huele a falso. No puede ser que a alguien no le guste ver televisión. Todavía recuerdo la primera vez que fui a la casa de A. De noche a las 5 de la mañana, caminando, no pasaba ningún taxi, y tuvimos tiempo para poder conversar por primera vez de verdad. Y fue ahí, cuando en tono medio en broma me dijo "yo amo la tele, la mitad de las cosas que sé, las sé por la tele". Claramente no era tan extremo, pero con eso me conquistó.


Ya sé que estas declaraciones suenan más light que el yogurt del que hablé antes. Lo sé y lo acepto. Y lo encuentro mucho más verdadero que todos esos que se desviven por escribir enredado y metafísico. Porque creo que hasta Martin Hopenhayn ve tele en sus ratos libres. Pero eso claro que nadie lo dice.

Thursday, September 07, 2006

pipopipopipopipopipo

Y se despejó. Desde que me subí a la micro en Pedro de Valdivia hasta que llegué a mi casa chispió (¿se escribe así?), y apenas pongo una pata adentro de mi hogar, se despeja y sale el sol. Ni siquiera fue una lluvia decente, eran esas gotitas molestosas que son tan chicas que se te meten en el ojo mientras caminas. Y chocas con todos los viejas que se tratan de ir lo más pegado posible a las paredes para que no se les moje su peinado, armado de una estratégica manera para que no se les note la pelada incipiente. Nunca he visto a una vieja totalmente calva en todo caso, pero si indagas debajo del peinado gigante y de la laca, se ve que hay menos de tres pelos por centímetro cuadrado. Me tinca que yo voy a ser de esas viejujas. Con tanto tratamiento capilar que me hago para que quede perfectamente liso, un día voy a amanecer con unas cenizas pegadas a la cabeza y una cosa parecida a un gato muerto en la almohada.
Anoche había un círculo en la luna, formado por nubes muy perfectitas. Nunca había visto algo así. Era medio tétrico, como si el fin del mundo fuera a venir luego. Al final no pasó nada. Igual estaba super volada, así que miles de teorías pasaron por mi cabeza. Como invasiones extraterrestres, o huracanes. No le dije a nadie mis pensamientos para que no se burlaran de mí, aunque unos minutos después estaban todos voladitos. Generalmente no me gusta fumar pitos en los carretes, me siento ultra perdida, como que cada uno anda en su propia onda, y al final lo termino pasando mal. Me gusta fumar en casa, viendo tele, con poca gente. Una vez me fumé un pito con mi nana y después se fue y me dejó sola en mi volada. Estuve mirando el techo como por 3 horas. Muy mal.

Últimamente he soñado puras cosas raras. Y eso es raro en sí mismo porque yo antes nunca soñaba. Anoche soñé que en mi universidad había una laguna, muy cochina y llena de ramas. Había una familia bañándose, y de repente dos pendejas chicas y rubias se ahogaban. Las sacaron y yo le hacía resucitación a una. La pendeja revivió, pero la otra se murió, la que no atendí yo. Y me sentía muy culpable, porque podría haberlas salvado a las dos. Después en el funeral, me daba cuenta que la niñita que salvé era la sobrina de la Pupi, mi amiga del colegio.
La sobrina de la Pupi murió el año pasado, en la vida real. Tenía 11 meses, y todavía nadie sabe de qué murió. A esa guagua ni siquiera la conocí, pero fue muy triste. Esto fue hace mas o menos un año, no sé porqué se me apareció en sueños ahora. Y tampoco sé si significa algo. Prefiero no interpretar nada. Ya lo hice una vez y resultó ser cierto. Aunque al final todo se resolvió, y de la mejor manera.
Ahora estoy escribiendo puras tonteras, pero es mejor esto que nada. Quería actualizar esto, para dejar atrás el último post, en el que estaba muy triste. Mucho más triste de lo que pensaba que iba a estar. Nunca pensé que iba a llegar a querer tanto a mi wachito rico. Pero sí, lo quiero, y mucho. Aunque sea más frío que una piedra, y aunque le guste asustarme y apretarme, y aunque a veces me haga sufrir sin que el quiera hacerlo. Y está bien que sea así. Porque cuando me da un abrazo y me dice cosas lindas es lejos lo mejor del mundo. O cuando estamos durmiendo y yo tengo frío, me calienta las patitas con las suyas. Eso sí es amor. Porque no hay nada que la gente odie más que una pata fría.
Ahora está todo bien, todo en orden, y puedo decir oficialmente que estoy feliz. De esa felicidad en que los campos florecen, los conejillos salen de sus cuevas y los cervatillos corren por el prado. De esa felicidad en que corres por la calle y quieres darle besos a todo el mundo. Porque mi pololo es el más rico y mejor del mundo, porque tengo buenas notas, porque tengo a los mejores amigos, y porque a pesar de todas las mierdas que el universo ha puesto en mi camino, las he saltado con gracia y sigo enterita. Y mejor que antes. Si fue necesario pasar por todas esas decepciones y relaciones tempestuosas para estar donde estoy, pues me alegro de todo eso. Ahora sé perfectamente lo que quiero, y nadie podrá detenerme. Groar!

Thursday, August 17, 2006

ch ch ch ch changes

Wá. Ayer tuve que volver al mundo real. Levantarse tempranito, armar el almuerzo en un tupperware (con la estricta advertencia de mi mamá de que si lo perdía de nuevo, no me iba a comprar otro, porque siempre se me pierden y los tengo repartidos por todas partes), y salir en metro a Escuela Militar. Que feo. Odio ese metro. Odio el metro entero. Nadie mira a nadie y todos me empujan. No sé si es porque soy tan chica que nadie me ve.
Después hay que tomar ese bus asquerosamente lleno, en que me apretujan para subirse como si irse parado fuera la muerte. Después llegar a la universidad culiá, a un ramo culiao de bacterias que no me importan, después tuve que disertar sobre una enfermedad fea que nunca me va a dar a mi. Después tener otro ramo, de caballos culiaos que tampoco me importan. A las 5:30 por lo menos se terminó todo y me pude ir de ahí.
Después de clases partí a las altas cumbres de Peñalolén a ver a mi Camila. Me tenía una comida especial, que linda. Conversamos, le lloré, nos reimos, vimos "Quien merece ser millonario" para adivinar las respuestas, pero la Camila hacía trampa y buscaba las cosas en Google. Me mostró unos comics ecuatorianos incoherentes de Popeye, vimos videos ochenteros de Wham! y Bangles para reirnos de los peinados de la época, y también vimos videos en YouTube, donde sale un niño mexicano gordo llamado Edgar que se cae de unos troncos y ahora odia a su primo porque fue su culpa que se cayera. Es más tierna la Camila. Me prestó su chaqueta de cura, para que no me sintiera tan mal porque me robaron la mía. Claro que nunca va a ser lo mismo. Nada lo va a ser.

En una hora más tengo que ir a la casa de la Paula, por que me invitó a hacerme una limpieza facial a su casa, con una señora que nos va a dejar la carita de porcelana. Nada mejor que un tratamiento de belleza para alegrarse, digo yo. Quiero estar linda de nuevo, con una sonrisa en la cara otra vez. Solamente me falta saber qué hacer para lograrlo.

Anoche cuando la Camila dormía al lado mío se me ocurrió una canción. La toqué en mi cabeza, con letra, y con las notas que correspondían. Quiero grabarla y escucharla mil veces hasta que se me salga toda esta mierda que tengo adentro y así seguir con mi vida. Por que el mundo sigue girando y no me puedo quedar parada al medio.


Ah! y una última cosa. Pido perdón a todos los que se frickearon con el sueño que tuve de mi gato. Nunca más verán un comentario tan apocalíptico aquí de nuevo.

Sunday, August 06, 2006

Misifús

Anoche soñé que se moría mi gato.
De un día a otro desapareció. Asumimos que se había perdido. Y llegó otro gato. Uno negrito, que cuando se lamía se veía que tenía las raíces del pelo blanco. Era gordo y lindo, pero no tanto como el mío. No lo pesqué. De echo en mi casa nadie lo pescaba.
En el sueño, pasaron como un día o dos. Mi gato todavía no volvía, y en mi casa todavía estaba el otro gato, el negro. Comía de la comida de mi desaparecido gato, y tomaba agua de su plato.
En un momento me asomé por una ventana del living, y ahí lo ví. Mi gato, mi gatito naranjo, estaba en la ventana, muerto. Alguien debe haber cerrado la ventana cuando él estaba entrando, y lo apretaron. Estaba aplastado en el riel de los vidrios, con los ojos abiertos, con la cabeza despegada del cuerpo.
Me acuerdo que lo tomé en brazos, y su cabeza terminó de despegarse. Me quedé con su cuerpo en las manos. Estaba seco, tieso, como si llevara muerto mucho tiempo. Sus ojos me miraban desde el suelo, recriminándome por no haberme dado cuenta antes de que siempre estuvo ahí. Y me puse a llorar, como nunca había llorado antes, haciéndole cariño a su cuerpo embalsamado.
En ese momento me desperté, y estaba llorando de verdad.
Fui a buscar a mi gato, que dormía enrollado en un cojín del sofá. Lo tomé en brazos y me lo llevé a mi cama.
Fue solamente ahí en que me dí cuenta de que si mi sueño fue premonitorio, tendría muchas más razones para llorar. Por que no creo que mi gato sea el que se va a morir. Sinó algo. Algo que me importa mucho más.

Friday, August 04, 2006

Buá

Que terrible. Se acabaron las vacaciones. Afortunadamente fueron 3 semanas y no solamente 2. En parte eso fue por que soy matea, si no me hubiera eximido de farmacología hubiera tenido dos insuficientes semanas. Fueron 3 semanas de tirármelas, ver tele y jugar en el computador. Claro que mis juegos de computador no son de esos 3D, en que tienes que matar soldados para poder escapar del holocausto. Mis juegos van desde el solitario, los sims y worms world party. Un juego más sofisticado no podría ser cargado en este computador anciano. En realidad Windows 98 ya no sirve para nada. Mi pobre PC no reconoce los pendrives. Tiene puerto USB porque quizás, en el futuro lejano, iban a servir de algo. Pero nada de lo que conecte ahí lo capta. Tengo una impresora nueva, que enchufé con toda mi dedicación, y ahí está, juntando polvo. La mando a imprimir algo y no hay conexión. Mi computador es tímido y anticuado. Le cuesta hacer nuevos amigos, y más aún si son más modernos que el. Pobrecito. Pero todavía sirve para lo que lo quiero usar. Se mete a internet, baja canciones y soporta MSN. Y se puede jugar Worms en el. Con eso, no necesito más. Nunca ha tenido ni una pana. Tiene sus virus, como todos. A veces se cierran las ventanas de programas sin que yo mueva nada. El mouse se desconecta solo, y hay que apagar el computador, enchufar el mouse de nuevo y volverlo a prender. Si estoy bajando canciones, no me puedo meter a ninguna página más porque no se abre Explorer. Pero ninguna de esas cosas me molestan mucho. Y si me molestaran sería una pena porque no tengo plata para comprarme otro. De todas maneras le tengo cariño. Se ha portado muy bien conmigo para tenerlo tan mal cuidado. Desde el 2001 que nunca lo han formateado, y conoció su primera desfragmentación este año. Jamás ha sido completado un scandisk. Se le cortó la correa del ventilador hace como un año y medio, y en verano se puede ver el aire caliente salir del CPU, como carretera en el desierto. Su única enchulación fue comprarle parlantes la zorra, pero de eso el ni siquiera se enteró.
Bueno, como iba diciendo, entré a clases después de unas merecidas y cortas vacaciones. Dormí como nunca, y carretié lo justo y necesario. Desde el lunes que estoy levantándome al alba otra vez, menos los jueves en que no tengo clases. Llegué para encontrarme con todos los compañeritos de nuevo. En realidad fue como si nunca hubieran habido vacaciones. Menos por los ramos, que tienen nombres atemorizantes. CIRUGÍA. MEDICINA INTERNA DE ESPECIES MAYORES. MEDICINA INTERNA DE ESPECIES MENORES. Que miedo.
Ya ni me acuerdo de la época en que tenía ramos inútiles, como economía, o ecología. En ese tiempo faltaba a clases y daba lo mismo. Ahora todo es importante, todo es terrible, y faltar un día es suficiente para echarse el ramo. Por eso todos sufren, no tengo ningún compañero que ande relajado por la vida. Nunca había visto tanto temor a enfermarse. Todos van a clases con fiebre, mocos, gripe o tos. Da lo mismo, no se puede faltar. Hace como 2 meses tuve bronquitis obstructiva aguda y no podía respirar. El doctor me dijo que tenía ocho días de reposo, y con suerte ocupé dos. Miré al doctor con cara de angustia y le dije "señor, no puedo darme ese lujo". Debo haber sonado a vieja, de las que si no van a trabajar, las echan del trabajo en la fábrica y no pueden llevar el pan a su hogar. Igual el señor médico me entendió un poco y me dio un antibiótico más power para que no me diera neumonía al salir a la calle en todos esos días en que debería haber estado acostada en mi cama.
Ahora no me queda más que hacerme la idea de tener que estudiar de nuevo y terminar este año culiao. Menos mal que cada vez queda menos. Voy a tener que volver a lavar y planchar mi delantal blanco, afilar los escarpelos, lavar mis botas llenas de caca de matadero, y tendré que saber llegar los sábados al Hipódromo Chile y a la Clínica Alemana para aprender a operar. Y todo esto con la carita llena de risa.

Tuesday, July 25, 2006

Amiguis



Después de que esta palabra, "amigui", se hizo ultra popular en la teleserie más popular aún, Machos, todos la usan indiscriminadamente, y hasta en modo de burla cuando se ven a puras minas copuchando y gritando en un bar, todas con sus moños desordenados para que se vea cashual, pero en verdad estuvieron frente al espejo dos horas peinándose. Pero en verdad tiene un significado más importante.
La amistad femenina es una cosa demasiado compleja como para intentar entenderla. Sólo se da, y hay que aprovecharla mientras dure. Toda amistad entre féminas pasa por sus momentos. Un día las minas se odian y hacen comentarios como "la maldita me cortó el teléfono, la odio" o "nunca más le voy a contar nada". Mi hermano siempre me dice que las minas son unas víboras, y que si pelan a sus amigas del alma, qué queda para ellos. Igual es cierto. Que levante la mano la mujer que nunca ha pelado al pololo de la amiga. Incluso con la amiga presente. Es que en realidad, lo que digan tus amigas te marca.
Yo personalmente, tengo a mi grupo de amiguis. De esas con las que te ríes de todo y de todos. Juntarme con ellas es mejor que pasar una tarde en Fantasilandia cuando tenía 12 años. Siempre tratamos de hacernos el tiempo para por lo menos juntarnos a tomar tecito, o hacer tacos y comer sin control. De hecho, la mayoría de las veces nos juntamos alrededor de comida.
Gran parte de estas amiguis vienen de la época escolar. Éramos de las típicas pendejas que hablaban todo el día y que todas las profesoras nos retaban. Casi nunca nos sentábamos juntas. Por lo menos ellas no querían sentarse al lado mío porque las desconcentraba demasiado. Sí, hablaba igual que ahora, lo que es decir, bastante. La Ana y la Camila tenían su propio rincón, en la parte de atrás de la sala, en el sector denominado "Cuba". Cada vez que llegaban tickets de fiestas, los convertían en naipes dibujados por ellas mismas para hacer campeonatos de poker en las clases de cívica. Los jokers eran lo mejor. Habían juglares, duendes, reinas de corazones, etc. Esas cartas todavía deben existir, en alguna de las cajas de embalaje en la casa de la Ana, que se ha cambiado tantas veces de casa que ya ni siquiera desembala sus cosas.
En realidad casi todas las tallas internas del curso provenían de nosotras, y los hombres comodines que llenaban las fiestas de curso eran amigos de nosotras. Los mismos amigos con los que nos seguimos juntando, y que se meten todos con todos. Hay una endogamia brígida en ese grupo. No me sorprendería ver guaguas deformes en el futuro.
Hoy en la tarde, estábamos con la Ana en la casa viendo tele, cuando nos llama la Carola, y vino a vernos para charlar. Conversamos, nos reimos, y cuando nos aburrimos salimos a caminar por Providencia. Ya nadie hace eso, salir solamente a caminar por ahí sin rumbo. Llegamos al Drugstore, vimos ropita, nos tomamos un chocolate caliente con una dona, nos congelamos un rato y después pacíficamente volvimos a la casa.
En resumidas cuentas, no hicimos absolutamente nada, pero lo pasamos muy bien.
Esa es la diferencia de las amigas con las amiguis. Amigas se pueden tener muchas, y amigos también. Pero esas personas con las que te puedes sentar y no hacer nada, y aún así te alegran el día, ésas son las que importan. Por muy pendejo que suene, tengo a mis amiguis, y con eso no necesito más.

La Rocío es otra de las amiguis. Ella apareció de la nada. Bueno, no de la nada. Era compañera del amigo del amigo, y nuestra primera conversación nació a partir de Denver, el último dinosaurio. No era compañera de colegio, y es un año mayor que yo. Al día siguiente de nuestra amena primera charla, nos juntamos a almorzar en el Mc Donalds cuando ella todavía comía carne. Y desde ahí que no nos separamos más. Estuve ahí el día de su graduación, estuvimos dos veranos juntas en La Serena con su familia, estuve ahí el día que llegó su bajo recién comprado a su casa, estuve en su primera tocata con Brandon Teena, fuimos juntas a ver a Placebo al hotel y también estuve en el aeropuerto despidiéndola cuando se fue por 9 meses a Inglaterra. La extrañé como enferma durante todo ese tiempo, y ahora por fin está aquí. Eeh!

A todas estas las quiero más... no sé que haría sin ustedes chiquillas.

Este es el post mamón del mes.
En agosto vendrá otro. Aunque todavía no sé de qué.

Pd: Había subido una foto donde salían todas las del colegio, pero no se quiere poner. Maida, no te ofendas.

Wednesday, July 19, 2006

El vil dinero

Ya saben ustedes que yo me inspiro leyendo cosas de otras personas. Y hoy el turno es del Feña. Fernando Briones, el hombre que canta en María Milagros y que toca el cencerro como músico invitado en Johou, mientras se contornea como Iggy. Su tema de hoy era la plata. Si mal no recuerdo, cuando yo era chica el tema monetario no era tan importante. No porque nos sobrara, in fact siempre vivimos bastante apretados, y todavía tengo el trauma de que nunca me hayan comprado esos paraguas de papel fucsia que vendían en las plazas. Y tampoco me compraron nunca un Danky. Y era feliz. Gracias a que mi mamá es parvularia tenía juegos hechos en casa, y siempre experimentó los juegos de los pendejos conmigo antes. En cambio ahora no sé si eso se usará, los niños están llenos de coches y estaciones didácticas con luces y cubos para estimular el cerebro. Yo nunca tuve eso. Cuando lloraba me metían en el corral que babeó mi hermano grande, y para que no me aburriera tanto me pasaban una muñeca sin pelo porque se lo corté. Aún así mi cerebro es bastante normal.
El tema de fondo es que ahora sin plata no eres nadie. No te puedes comprar ni un dulce, no puedes andar en micro, que cada día está más cara, entre mil otras cosas. Aparte de que no puedes andar con nadie que tenga plata porque todos se compran cosas menos tú, lo que puede llegar a ser peor que no tener plata en sí.
Desde que entré a la universidad, el tema "dinero" es cada vez más importante para mi. Tengo una mesada paupérrima que no ha tenido ninguna modificación desde que entré a la U hace 5 años. Y como la inflación aumenta y mi mesada no, cada vez me alcanza para menos cosas. No puedo pedir que me den más mesada, en parte porque me la están dando, y también porque sé que mi mamá no me puede dar más. En vez de quejarme debería trabajar. Pero sencillamente no me alcanza el tiempo. No tengo ni sábado. Tengo como 12 horas de clases diarias. Pero filo, en un año más debiera tener trabajo. Espero. Una vez ya escribí sobre eso, asi que no lo voy a repetir para amargarme sola de nuevo.
En verdad no sé que pasó con el mundo. Prendo la tele y están diciendo que subió la bencina, el gas, el agua, el pan, que Bolivia nos odia porque no les damos mar, que en Israel se muere un niño por hora, que hay gente que vive en casas de 2 x 2. Ustedes me conocen, nunca he sido pacifista ni he participado en marchas antiguerra, tampoco he ido a construir mediaguas ni he mandado comida no perecible a la cruz roja. Nunca me han impactado esas cosas, no porque no me importe, sinó porque siento que cada vez esto va empeorando más, y ya nadie puede hacer nada. Porque si hay gente pobre en Chile no es porque nadie construya mediaguas, es porque seguramente hay un empresario revolcandose en los billetes que los pobres se demoraron años en juntar. Y eso sí que es invencible. Porque mientras los que controlen toda la plata no quieran dejarla, nunca se va a arreglar nada.
Esto ya se transformó en discurso social. Que lata. No hay tema más trillado, junto con la religión. Pero lo último que digo: que quede claro que estoy hablando de las personas honradas. Esos flaites culiaos que salen a robar porque "no tuvieron otra oportunidad en la vida" que lo chupen. Y bien chupado.
En fin, la plata mueve mala onda, tanto en los que la tienen como los que no. Como dijo mi amiga Camila, "me gustaría irme a vivir a una isla, y comer raices". Eso de que el dinero no hace la felicidad definitivamente lo escribió un ricachón. Yo no sería feliz sin tener qué comer. O pensando en que cualquier día me pueden embargar la casa. Ahora la gente tiene guaguas pensando en cómo van a pagar la universidad del pendejo. Quizás esa es la razón por la que las tasas de natalidad han bajado tanto. Ahí tienen, señores sociólogos.
La otra vez mi mamá me dijo "tuviste mala suerte de nacer en esta época". Bah! Díganmelo a mí!

Friday, July 14, 2006

(no subject)

Tengo sentimientos encontrados con respecto a esto de los blogs. Por una parte, es lo mismo que tener un diario de vida, pero ahí, a la luz de todos. Esa es la pesadilla de todo adolescente. Es casi como que te leyeran la agenda Pascualina. Si po, yo podría tener un cuaderno y escribir estas mismas cosas, sin necesidad de publicarlas. Pero despues me di cuenta de que yo disfruto mucho leyendo los blogs de otras personas. No por morbosa, sino por que todos tienen formas tan distintas de escribir, y es divertido ver como las personas pueden contar un mismo hecho de una manera tan diferente. Por ejemplo, la Ana (Siempre la cito a ella, lo siento. No conozco tantos blogs) escribió sobre nuestra aventura del miercoles. Y aunque yo estuve ahí con ella toda la tarde, cuando leí lo que escribió fue como verlo de afuera, y me pareció más divertido aún. Esa es una de las razones por las cuales esto está abierto al mundo. Aparte que se puede conocer mucho de una persona por la forma en que escribe. Si alguien escribe poemas de dragones y hadas y muerte, ya puedo decir de antemano puaj. Si usan mucho las palabras "tristeza", "preludio", "surrealista", "nihilismo", o citan libros con muchas de esas palabras, también puaj. Odio a esa gente. Debe ser porque tuve una experiencia bastante traumática con personas así. Eso de buscar la forma "intelectual" de decir las cosas lo encuentro patético. Prefiero mil veces que me digan "me siento como el pico", a "siento que mi vida está cayendo en una vorágine de emociones que me envuelven y me arrastran hacia la oscuridad". Y acabo de cachar que usé demasiadas comillas en un solo párrafo.

Cambiando de tema, esto de estar de vacaciones me vino de perilla. Necesitaba dormir y tener un tiempo para mí. Yo creo que por eso es viernes y yo estoy en mi casa. Como este semestre tuve clases los sábados siempre me quejé de que no podía carretear, y ahora que puedo, no quiero ni asomar la nariz afuera. Aparte que no hay mucho que hacer. Casi todos los amigos se fueron a la playa, el novio trabaja y la roommate anda sirviendo piscolas en un bar.
Me encanta tener roommate. Sé que es temporal, pero ha sido muy cul. Hemos fumado caleta de pitos, hemos tomado caleta de chelas, descubrimos en el último video de Shakira a un pendejo disfrazado de momia que mueve un palo, y nos reimos horas. Lleva aquí casi un mes y no nos hemos peleado nunca. Y eso que vivir conmigo es todo un desafío. La voy a extrañar cuando se vaya.
Aparte de ella, la Camila también vivió conmigo una vez, por dos meses. Aunque debo decir que nunca estábamos en la casa. Carreteábamos todo el día. Ahora que lo pienso, no sé como nunca amanecimos en un paradero de micro tapadas con un diario. Qué buenos tiempos eran los del 2004. Tenía banda, sala de ensayo que funcionaba como casa de eventos, pocos ramos en la universidad... era la gloria. Ahora no tengo banda, tengo muchos ramos, y la sala de ensayo se convirtió en una sede del partido comunista.
Ayacucho era la raja. Ensayábamos y después nos quedabamos a carretear. Todos los meses contábamos las monedas para poder pagar las $60.000 que nos tocaban, pero sí que valía la pena. La primera vez que fuimos, fue cuando era Estudios Elefante todavía. Nuestra manager, Fran, en uno de sus tantos viajes conoció a un hombre, el famoso "Señor Salvatierra", que tenía un estudio, y le ofreció grabarnos gratuitamente. Estuvimos todo un día grabando, y ese día conocimos a un joven muy simpaticón que después cachamos que se llamaba Peter Estay, y tocaba en Amongelatina. Después algo raro pasó, al Señor Salvatierra lo "fueron" del estudio, se llevó todas sus maquinarias raras y Ayacucho quedó como sala de ensayo y sede de tocatas. Y Amongelatina nos ofreció ensayar ahí, junto con ellos y con María Milagros. En parte porque les caíamos bien, y también porque necesitaban la plata. Y puta que era harta plata. Ahí también conocí a Aníbal, el guitarman de MM. Pero me caía como el hoyo. Una vez grité muchos improperios en su contra y el justo estaba atras mío. Menos mal que no escuchó. Pero como del odio al amor hay sólo un paso, lentamente el "es rico, pero me cae como el pico", se transformó en "es rico y quiero para mi!". Y ahora es mío, muajaja. Así que ya lo saben, cualquier chiquilla que se le acerque se las va a tener que ver conmigo primero. Y yo pego fuerte.

Thursday, July 06, 2006

Pánico Escénico

Sí. Esto ha pasado a hacerse público.
Todo se debió a que recibí un comentario de un futuro colega (eehh!) y estuvo mucho tiempo ahí sin que me diera cuenta. Como lo pronostiqué en un principio, estaba claro que no iba a durar mucho mi veta narrativa. Desde abril que esto está parado, y me metí hace unos días para si esto seguía vivo. Cuanta no sería mi sorpresa al ver un post en mi última entrada. Cómo llegaron aquí, nadie lo sabe. Pero la cosa es que alguien opinó sobre mi escrito. Y en realidad, si ya lo leyó una persona, porqué no habrían de leerlo otras. Este blog ha sido desflorado.
Desde abril han pasado 3 meses. Tres terribles meses en que había que hacerse el tiempo para poder comer tranquila, lavarme el pelo, dormir más de 8 horas en una noche, revivir vida social, etc. En esos tiempos, si escuchaba a una sola persona más decir "oye que estás desaparecida" me tiraba al andén del metro. Nunca he sido una persona obsesiva con el estudio, de hecho, odio estudiar. Eso de tener que ponerme frente al cuaderno y decidirme a empezar me saca los choros del canasto. Me pongo mal genio y le grito a la gente que ose transitar a mi alrededor. Pero por mucho que me moleste estudiar, este año he tenido que hacerlo, y con la cara llena de risa.
Hace poco una amiga de la universidad congeló la carrera, en parte por problemas personales, y también porque esta carrera te succiona toda la energía vital. Lo sé, suena flaite, pero no sé como más describir esa sensación de que, no importa lo feliz que pueda ser tu vida afuera de la universidad, igual no vas a tener tiempo para disfrutarla. Onda "me gané el Kino! pero tengo clases de lunes a sábado, y pruebas durante toda la semana, asi que no puedo salir a comer, ni ir al cine, ni carretear". Sucks!
Este lunes vi a mi amiguita, y estaba tan... feliz. Estaba rosadita y echando la talla. No como el resto de nosotros, que estamos pálidos, con úlceras y con la mitad del pelo que teníamos en marzo. Y todavía nos quedan 3 semestres más como éste.
Hoy tuve mi único exámen del semestre (por que de los otros dos me eximí, disculpen). Con el profesor que más odio y que más me odia. De hecho, creo que es el único profesor que me odia. En su parte del ramo me saqué un 2,1. Uf! golpe al ego. En las otras partes del ramo tuve un 5,6 y un 5,1. Pero no lograron salvarme del exámen maldito. Hoy todos los alumnos desfilaban a las 9:00 rumbo a la sala de la prueba, como quien va al patíbulo. Cabeza gacha, leyendo los últimos detalles de materia. A esas alturas, se te olvida todo. Se empiezan a escuchar preguntas tipo "¿Los perros pueden tener pelo, cierto?" o "¿Cuántas patas dijiste que tenían las vacas?". Horror.
Luego de 3 largas horas, empiezan los desmayos y los llantos, por que entregan las notas de los exámenes. Lo único bueno de mi universidad es eso, que entregan las notas de los exámenes el mismo día. Así por lo menos la angustia dura menos. Minutos antes de la entrega de notas, un compañero me dice "que miedo, siénteme el corazón", y el pobre tenía los ojos medio saltones, y se le veían los latidos a través del chaleco. Afortunadamente, el susodicho pasó el ramo. Y yo también. Pero no faltan los pobres cristianos que se echaron el ramo con un 3,9. Si te vas a echar el ramo, por lo menos échatelo dignamente. Y lo digo con conocimiento, yo reprobé genética con un 3,9 y hubiera preferido quedar con un 2,0.
Aparte de estudiar, y uno que otro carrete memorable, estos tres meses han pasado por mi sin pena ni gloria. Que lejanos se ven los días en que carreteaba de viernes a lunes. Snif. Por lo menos ahora se vienen las vacaciones de invierno, que sé que serán insuficientes para poder recargar mis pobres pilitas. Espero que por lo menos me vuelva el color.

Sunday, April 16, 2006

El trabajo enaltece y dignifica

Leyendo el blog de mi amiga Ana, me di cuenta de que ya estamos bien viejitas. O sea, no viejas para usar bastones o quebrarnos la cadera por la osteoporosis, pero sí que ya no nos falta nada para egresar. A casi todas mis amigas les queda un año (este). A mi me quedan dos, lo que no deja de preocuparme. A diferencia de ella, yo sí siento que he aprendido en estos cuatro años que llevo de levantarme con los pollos para acudir a mi Alma Mater. Debe ser porque son carreras absolutamente distintas (veterinaria v/s periodismo), pero aún así siento que me queda mucho por aprender, comparado con el poco tiempo que me queda. Es cierto, todo se aprende en la práctica, me lo han dicho todos los profesores y ex alumnos, y yo misma lo pude comprobar en sólo una semana de trabajo no remunerado en Clínica Tobalaba For Animals Only.
Hoy mi mamá en el almuerzo me hizo la pregunta del millón. ¿Qué es la gripe aviar? y yo como libro le recité todo lo que sé. En teoría me lo sé todo, pero estoy segura que el día que me llegue un pollo (no un humano, ese no es mi campo) muriéndose de influenza, voy a quedar paralizada y voy a salir corriendo por la puerta de la clínica a la velocidad de la luz. No es que no confíe en mis conocimientos, pero a veces siento que me falta el chispazo necesario como para ejercer. Conociéndome, y sabiendo que cuando tengo que hacer algo a presión muero de stress, no sé que voy a hacer cuando llegue un pendejín con su perro atropellado, llorando y pidiendome que lo salve. Ahí nomás voy a quedar. Para esta carrera se necesita pensar rápido y actúar. No pensar tanto, porque mientras te quedas rascándote la cabeza el perrito ya se murió.
Además del riesgo de que se te mueran todos los pacientes, está el otro tema, y más importante que el anterior. NO HAY PEGA. Si no se tiene pega, no tienes el riesgo de matar a nadie, eso está más que claro.
Me da miedo ejercer, y me da miedo no ejercer nunca. O más bien dicho, me da miedo no tener la oportunidad de ejercer. Es cierto, cada vez las personas se preocupan más de sus animalitos, pero también es verdad que cada vez que respiro egresa un veterinario más. Y lamentablemente, no se muere ninguno. No es que le esté deseando la muerte a mis futuros colegas, por supuesto que no, pero si el flujo de entrada y salida fuera un poco más proporcional, me convendría bastante. Igual el tema no va en que salgan veterinarios y se mueran veterinarios, sinó que consiste en que Chile está saturado de todo tipo de profesionales y de técnicos y de todo. Hasta para ser barrendero tienes que dejar curriculum, y te dicen "te estamos llamando". Weon, y el pobre aspirante a barrendero se va a su casa a sentarse al lado del teléfono, y a rogar para que lo contraten por diez pesos la hora. Yo creo que si hubiera estudiado cosmetología tendría más esperanzas de encontrar pega de las que tengo ahora. Y por último, nadie se me puede morir en la silla de maquillaje. A lo más una novia furiosa me atacaría con su ramito de flores, el mismo por el que las minas en los matrimonios se agarran del moño. Como si esa tradición fuera real. Deberían hacer un estudio sobre cuantas mujeres que agarran el ramo se casan primero que las que no lo agarraron. Personalmente, yo opino que esas minas son las que nunca se casan. A qué hombre le gustaría tener de polola a una de esas patéticas que son capaces de morder a otra con tal de tener la mínima esperanza de casarse? Conociendo bastante al género masculino, podría afirmar que los hombres huyen de esas desesperadas. Así que ya lo saben chiquillas, no luchen por el ramo. Al menos no delante del hombre que se quieren engrupir.

Siempre pierdo el hilo cuando empiezo a escribir en estas cosas internetísticas. Soy la peor narradora que hay. Shame on me. Menos mal que no estudio periodismo. Y que nadie lee esta tonterita.

Friday, April 14, 2006

Viernes Santo

Días como estos me ponen media melancólica. Los viernes santos siempre han tenido ese efecto en mí. No sé si es porque todos salen de Santiago y la ciudad queda desierta, o por el ambiente semiespiritual que se respira, o porque todas las radios se confabulan en poner música "reflexiva". Por lo de las radios no me quejo, durante todo el año espero este día para escuchar las baladas ochenteras que me gustan. Lo que no entiendo es por qué una de las canciones que más ponen en las radios este día es "The Unforgiven" de Metallica. Metallica es uno de los grupos más paganos que ha existido. Bueno, eso era antes. Ahora son unos viejitos mamones que todavía se esfuerzan en ser metaleros. Pero no sé como no entienden que no se puede ser metalero después de los 45 años. Cabecean un poco y les da el lumbago, y antes de que se puedan dar cuenta ya lo tienen todo tomado.
Como iba diciendo, este día me complica y me trae sentimientos encontrados. Por un lado me gusta el silencio de la ciudad y me gusta el ambiente de domingo que se forma en estos días. Mirar por la ventana y encontrar ese sol que no calienta nada típico de los otoños cuando están empezando. Me dan ganas de agarrar una bicicleta y andar por hojas secas escuchando musiquita, y pasear. Pasear como lo hacía antes, hace un par de años. Era panorama agarrar el discman y caminar hasta Irarrazabal por José Miguel Infante, y devolverme por Salvador, y ver puras viejas paseando sus perros, y viejitos en pantuflas regando el patio de adelante, y ver las panaderías con personas comprando la marraqueta para la once. De más está decir que después se van a sus casas a ver sábado gigante, y se comen la marraqueta con un té supremo bien cargado, y todo eso mezclado con el olor a parafina y a la naranja que se quema arriba de la estufa. Así me imaginaba a mi misma cuando era chica. En una casa vieja con cortinas de gasa, en esas calles donde sólo se ven puertas, y todas las casas están pegadas entre sí. Viendo un programa de la tarde de sábado o de domingo, comiendo pancito crujiente, iluminada solamente por la luz amarilla de una ampolleta. Todavía quiero eso. Y lo quiero luego.
Estos días tienen el poder de ponerme triste, aunque técnicamente no tengo ninguna razón para estarlo. Me imagino si lo tuviera... Ahora, sin darme cuenta miro hacia afuera, y me pongo media tristona. Pero después me doy cuenta de que estoy sonriendo. Por que tengo con quien pasar este día, y si quisiera, podría levantar el teléfono, y mi hombre vendría a rescatarme. Espero. Por lo menos me gusta creerlo así. Pero no. Yo sé que vendría. Por que me quiere, y porque es el único con quien me gustaría estar en mi casita con cortinas de gasa comiendo pan, viendo la lluvia afuera y viendo programas de concursos.

Sunday, February 19, 2006


uy Posted by Picasa

capitulo 2

he vuelto, con otro blog y con otras ideas.
los que conocieron el otro pueden saberlo. ese todavía existe, entremedio de mil otros blogs, pero no lo voy a usar más. podría usarlo todavía, solamente que escribiendo cosas nuevas, pero ha pasado tanta agua bajo el puente, que no se puede. no puedo mezclar en un solo sitio dos años de mi vida, donde todo cambió del cielo a la tierra. por lo tanto, tomé la opción de empezar de nuevo, con otro lugar y con otro objetivo.
el objetivo nuevo todavía no está definido, pero queda mucho tiempo para hacerlo (este comentario sería bastante irónico si me muriera mañana). en todo caso, no tiene porque tener un objetivo. es como buscarle el sentido a la vida, está ahi y solo al final del camino averiguas de qué sirvió todo. es bastante estúpido comparar un blog a una vida, pero para algo existen las metáforas y yo las uso como quiero porque este es mi espacio y puedo decir todo lo que se me ocurra.
no espero convertir esto en un diario de vida, porque conociendome, lo más probable es que después de dos semanas ya no escriba más. tampoco pretendo que muchas personas lo vean. la verdad es que no espero nada de esto. esto es para mi, y si hay gente que se entretiene leyendo vidas ajenas, pues bien por ellos.
aquí va la primera entrada.
1 2 3 go!